lunes, 29 de noviembre de 2010

Humildad, quietud, coraje…

todos los miedos (el único miedo) se avecinan,
y es maravilloso
: Este planeta andando y nosotros andando
como los locos,
: la muerte y su gran ropaje de reina, de naufragio
y de olvido,
: las cosas que no se ven, ni se oyen, ni se tocan
ni se olvidan
; esas cosas se avecinan
se acercan al quieto, al humilde,
al aprendiz de guerrero valiente,

Y es maravilloso.

Los maestros de lo sagrado lumínicos se acercan,
groseros e indiferentes, en la sublimación del amor
libidinal y divino, se acercan
a hablarnos callados al oído (A veces les sentimos el aliento
¡y son tan humanos! y están tan prendidos
de un fuego pacífico…)
de las cosas que no hemos visto
, se acercan a hablarnos,
pero queremos,
en el caos ferviente del huevo que se rompe, verlas
por cualquier medio
(por todos los medios
el único medio

de la meditación)
Y es maravilloso.

2 comentarios:

Anónimo dijo...

Estoy de acuerdo! E.

父 dijo...

!Muy lindo!